Tras un inicio de año donde empezaba casi desde 0 debido a varias semanas de desmotivación y un encadenamiento de procesos gripales que me tenían machacado, decidí apuntarme para tener un objetivo serio a la vista que me obligara a ponerme las pilas... A pesar de esto, la irregularidad me ha marcado esta temporada, alternando semanas de buenos entrenos y salidas largas con otras de mucho parón, y es que la vida en ocasiones no lo pone nada fácil y te obliga a estar peleando y peleando por encontrar un hueco para salir a rodar, para mantener una mínima regularidad, y acaba resultando muy agotador...
Las semanas avanzaban y cuando me quise dar cuenta apenas quedaba un mes, así que aproveché para retomar la BTT (Posiblemente el año que menos la estaba tocando) y hacer salidas largas con el objetivo de preparar las piernas y la cabeza, buscando subidas kilométricas por la zona del Montseny... Y así me planté en la salida de la PDF, sin demasiado entreno pero con la ilusión de enfrentarme a un reto así.
Del recorrido poco más puedo aportar de lo que lo ha hecho el compañero Carbono. En general me gustó bastante aunque había tramos demasiado técnicos para mi, tramos que me iban poco a poco minando la moral y me obligaron a tirar de paciencia y cabeza todo el día. Además las lluvias de los dias previos no ayudaron ya que estas zonas complicadas lo estaban todavía más, con numerosos senderos atravesados por cauces de agua o incluso el propio camino parecía un rio (tramos en la primera bajada desde el túnel hacia Vilaller y en el descenso del Coll de l'Oli), dia de pies mojados casi desde el principio.
Ya desde la salida rodé junto a los compañeros Kuki y Aquili, tratando de seguirlos en todo momento de una manera muy conservadora, todo el día guardando y guardando por lo que pudiera venir, apretando los dientes para no perder comba en las subidas y sufriendo mucho en las bajadas, donde se me marchaban y tenía que centrarme en bajar a mi ritmo, sin arriesgar (que algún que otro susto me llevé muy pronto) para volver a conectar con ellos al final de la bajada, en algún tramo más pedaleable o algún avituallamiento.
Así se fueron sucediendo los puertos con sus posteriores descensos, la subida del Túnel de Vielha, el Coll de les Serreres, Sant Salvador, el Coll de Peranera y Sas..., y llegó el temido Coll de l'Oli, donde comencé a sufrir calambres en los últimos kms de subida que me obligaron a caminar un rato (¡¡¡No habíamos llegado todavía a la mitad de recorrido!!!), pero bueno, los conseguí apaciguar en unos minutos para continuar hasta arriba, también sobreviví como pude a los tramos no ciclables de la bajada para llegar a La Torre de Capdella (Km 97 aprox.) y volver a reunirme a los compañeros de fatigas. Físicamente iba ya cansado, sobretodo por los agotadores tramos donde había que desmontar, caminar... Te rompían el ritmo, aunque me encontraba muy bien de cabeza de cara a afrontar el interminable Coll del Triador, el cuál iniciamos los tres mosqueteros chino chano para coronarlo un par de horas después, la temperatura comenzaba a subir aunque las numerosas nubes nos protegían bastantes ratos del sol, cosa que se agradecía. En alguna de las rampas más duras cerca del final, opté por caminar de nuevo ante los amagos de calambres que volví a sufrir, que por suerte fueron los últimos.
Una vez arriba (km 113) y tras avituallarnos + las fotos de rigor, proseguimos la marcha hasta el Coll de la Portella Blanca (Km 124), techo de la PDF, fue en este tramo donde comenzó mi decadencia, sufriendo sobremanera para seguir el ritmo de la tropa, un tramo sube y baja interminable aunque espectacular paisajísticamente hablando, que es con lo que se acaba quedando uno con el paso del tiempo. Tras coronar la Portella con un durísimo repecho final, largo descenso hasta Espot donde de nuevo volví a sufrir para seguir el endiablado ritmo de todo el mundo, llegando al avituallamiento de Espot bastante tocado, hasta las narices y sin ganas de seguir pedaleando pero cabezón que es uno, no podía quedarme allí y en mi cabeza solo aparecía la opción de seguir. Los posteriores tramos alternaban carretera, senderos, pistas, subidas y bajadas, el desgaste seguía implacable pero el piloto automático que llevaba puesto desde hace varias horas, me llevaba siempre adelante, no recuerdo mucho pero si un tramo de sendero precioso que apenas pude disfrutar por la fatiga, aunque me gustó, para acabar desembocando en la carretera que lleva al puerto de la Bonaigua, a partir de aquí conseguí hacer un click mental, ya que se habían terminado los tramos más técnicos.
Ubicados en la Vall d'Àneu y tras rodar unos kms por asfalto llegamos al antepenúltimo avituallamiento, situado en Isil, "solo" quedaban 26kms de subida para coronar la última dificultad del día, la parte más alta del Pla de Beret.
Por una bonita y agradable pista junto al Noguera Pallaresa fuimos ascendiendo metros, agrupándonos con otros bikers que aparecían y desaparecían para llegar a las inmediaciones de Montgarri, donde nos saltamos el penúltimo avituallamiento ya que venían las rampas más duras de la subida. Una vez llegamos a Pla de Beret, decidimos no desviarnos al último avituallamiento y optamos por abrigarnos, volver a poner luces y lanzarnos para abajo rumbo a Vielha. Como había pasado la hora límite para bajar por senderos, nos tocó bajar por carretera, entre una espesa niebla y la noche que comenzaba a cerrarse sobre nosotros, y en media horita nos plantamos en meta, con la satisfacción de haber completado la aventura sin incidencias, 18h y 211kms después del pistoletazo de salida.
En fin, una gran experiencia vivir una aventura de este calibre con buenos amigos, con los que he tenido la suerte de vivir muchas otras aventuras (y las que nos quedan), viejos rockeros de los cuales siempre se aprende algo, disfrutando y sufriendo como un cabrón un recorrido espectacular.
Aunque por otra parte, una experiencia que difícilmente creo que vuelva a repetir, ya que requiere muchos sacrificios y mucho tiempo de preparación, un tiempo que hay que quitar de otros planes que he tenido que dejar un poco de lado en los últimos tiempos, planes que a dia de hoy me llaman más. Así que me quedo con los buenos recuerdos de esta experiencia y a mirar otras aventuras.
